Informe final revela que la muerte de Cory Monteith fue accidental.

Aunque en el mes de julio la autopsia reveló que el actor canadiense murió a consecuencia de una sobredosis de fármacos, heroína y alcohol, recientemente se emitió el informe final en el que se determinó que el fallecimiento fue accidental.

Cory Monteith, de 31 años, que saltó a la fama por su papel como Finn Hudson en la serie "Glee", fue hallado muerto en su habitación de hotel en Vancouver el 13 de julio de 2013.

La forense Claire Thompson concluyó que Monteith “murió por una mezcla de intoxicación por drogas, con uso intravenoso de heroína combinado con la ingestión de alcohol”, dijo un comunicado de prensa.

“Los investigadores de la escena encontraron un parafernalia de drogas, incluyendo una cuchara con residuos de medicamentos y una aguja hipodérmica usada, junto con dos botellas de champán vacías y vasos. La investigación confirmó que el señor Monteith regresó solo a su habitación de hotel a las 2:16 am el 13 de julio”, señalan en el informe.

“También se confirmó que tenía un historial de uso de drogas ilícitas, con períodos intermitentes de rehabilitación y de la abstinencia a las drogas. Cabe señalar que si alguien se ha abstenido de usar opioides (que incluyen la heroína) durante un período de tiempo, la tolerancia puede disminuir”.